jueves, 29 de enero de 2009

"El aprendizaje y el desarrollo de las competencias"


nihuitrón_¿El aprendizaje es algo tan absolutamente trivial que se puede observar y medir con base en unas simples preguntas a propósito de unos contenidos cualesquiera?


El aprendizaje como un concepto genera una serie de significaciones bastante complejas, al grado que podemos distinguir aprendizaje, de aprehendizaje con “h”, por lo que no es posible sostener que hablar de él sea algo superficial o trivial como lo sugiere la pregunta.
Empecemos a distinguir:
En forma cotidiana se ha pensado en general que el aprendizaje son una serie de estímulos externos que se imprimen en la conciencia de los estudiantes, los cuales tienen que repetir “memorísticamente” (corriente tradicional-conductista) para dar como válido y/o verdadero el conocimiento como aprendido; se sustenta que es “observable y medible” puesto que reproduce fielmente el estímulo externo a través de preguntas y respuestas esperadas por el maestro.
El problema con el aprehendizaje con “h” es más profundo, pues implica desde un enfoque constructivista, que es el estudiante quien “construye”, “se apropia”, “hace suyo” el conocimiento y dentro de este proceso intervienen infinidad de factores que generan que el estudiante “decida” aprehender y esa “decisión” depende, según Piaget, de factores físicos-biológicos y esquemas cognitivos, porque sustancialmente, su desarrollo y potencialización se dan de acuerdo a la relación con el medio específico ( diría Vigotski, en un “contexto social”) a través de la acción, por medio de la cual, se ponen en movimiento dichos esquemas o estructuras en relación a dos impulsos dentro de la naturaleza humana y que son: la asimilación y la acomodación de este proceso resulta, la adaptación.
Todo estudiante se resiste a aprehender, puesto que de forma natural se siente amenazado en su constructo sobre la realidad (que podemos interpretar como su zona de desarrollo próximo, diría Vigotski) el “sí-mismo” y su relación con lo “otro”.
Nuestro papel como docentes es propiciar “conflicto cognitivo”, esquemas, que al ponerlos en actividad y en movimiento conceptual y perceptual permiten la entrada de conocimientos nuevos; sin embargo, no es fácil generar esa apertura sino es a través de “escuchar” y “observar” los intereses de nuestros estudiantes, por lo que la carga significativa de este “interés” está decidido por ellos y de sus saberes previos que les permitan adaptarlos a los nuevos contenidos y construir su propio conocimiento, construyéndose al mismo tiempo así mismos.




El factor “motivación” (movimiento desde el interior del ser) es un ingrediente fundamental en ese “interés” que el estudiante genera a través de empatar con él mi interés como docente (que se construye así mismo ayudando a que ellos construyan su propio ser), participar fundamentalmente en el propio interés del estudiante y con esto “seducirlo” hacia nuevos contenidos que el “quiera” o “decida” construir con nosotros a través de sugerencias que apoyen como un “andamiaje” lo que construya como un nuevo saber, por lo tanto las preguntas se realizan no para esperar una respuesta o una conducta determinada, se realizan como una estrategia que permite problematizar no sólo un contexto social concreto sino su propio “aprendizaje situado” en su dimensión conceptual y valoral, pues cuando el estudiante “decide”, “elige” aprehender, pone en “acción” y movimiento todos sus esquemas, estructuras cognitivas y sus valoraciones que se abren a través de la emoción y la afectividad, el “agrado” de tener en sus pares y expertos unos “acompañantes” en colaboración continua, crean un ambiente de aprehendizaje “cómodo”, “placentero” y no amenazante; pues su reacción natural será de “miedo” y por lo tanto de resistencia a la entrada de nuevos contenidos. Por miedo aprende memorísticamente a “corto plazo” sin embargo, no se apropia de ello y no lo hace parte de sí, en contraste, los aprendizajes que sí le significan quedan ahí para equilibrarlo dentro del mundo que en continuo el va construyendo y reconstruyendo, conforme va poniendo en movimiento su ser y que lo hace humano en relación con sus semejantes y con los seres que no lo son y que forman parte del marco natural siendo él mismo naturaleza.
Es por esto que yo no puedo trivializar el aprendizaje, ni dar una explicación superficial porque estamos hablando de “seres humanos” que siendo únicos como especie e individuos, somos seres conscientes que deseamos comprender el mundo y entenderlo como un “todo” que sostiene nuestra vida y la de otros seres que lo comparten con nosotros, incluyendo el mismo planeta.


Profra. Norma Irene Huitrón Baena.

1 comentario:

Prof. Huitron dijo...

Hola Norma, es verdad que el aprendizaje no puede ser algo tan trivial debido a que es una de las formas en como el ser humano se transforma para desempeñarse personal, social o profesionalmente.
Dentro de las fortalezas que descubro en tu escrito están:
- Sabemos que el aprendizaje puede ser medible
- Que aprender no es memorizar
- Es necesario poner al alumno en acción para lograr la asimilación (pero también al profesor).
- Se nos esta desarrollando una gran capacidad de observación en nuestros grupos
- Estamos motivados a realizar este cambio
- Sabemos que estamos trabajado con seres humanos y el ser humano por naturaleza es complejo en su pensamiento y acción.
De las debilidades puedo mencionar:
- Cuando se habla de que el alumno es quien construye su propio conocimiento ¿podemos realmente confiar en esa construcción?
- Es el alumno quien decide aprender o no, esto es un gran reto para nosotros, influir positivamente en esta decisión.
- El entorno que rodea al alumno es quien le ayuda en varias ocasiones a construir su conocimiento ¿que pasa con los jóvenes que viven situaciones personales difíciles en su propia casa?
- Actualmente los jóvenes se limitan a aprender

Debido a todos estos puntos creo que como docentes tenemos que apoyarnos de los demás para mediar adecuadamente toda la información que le llega al alumno, con la cual construye su conocimiento; encontrar la mejor forma de fomentar la ayuda mutua, la colaboración, compañerismo, hábitos saludables, etc. para que estos saberes le permitan lograr su superación personal y evitar así la deserción estudiantil, situación que esta afectando a nuestro país.
María de Jesús Huitrón M.